POSDATA:
TE AMO
Te amo, necesito abrazarte
Que tu respiración me
alimente,
Que con cada latido
Desaparezcan a golpes de
amor
La ausencia y la
amargura,
Pues de tu pecho
Brotan besos
Que al ritmo de un “te quiero”
Me protegen, me acunan
Y mis demonios duermen.
Te amo. Necesito mirarte
Para saber en tus ojos
De qué está hecho el
cielo,
Para beber en tu mirada
Gotas de alma y de
sueños,
Pues con tus brazos
Forjas invisible
armadura
Para que no me hiera la
espada
Del abandono, de la
derrota,
Para que no muera de
frío
El cariño que de ti
necesito
Posdata: ¡Te amo!
LA SOMBRA DE LA BESTIA.
Se cree que hace mucho tiempo en Jalisco, hubo un hombre llamado Alberto. Él era un muchacho muy alegre, siempre tuvo amigos por todo Jalisco. De repente comenzó a correr un rumor de que una bestia asesinaba el ganado y las mascotas que la gente tenia en sus ranchos y casas.
Una noche un anciano escuchó que sus animales estaban alborotados y recordó que una bestia merodeaba el pueblo asesinando a los animales; entonces corrió hasta donde estaba el ruido y solo alcanzó a ver la sombra de una bestia que se llevaba una gallina entre sus colmillos.
Esto causo gran impacto en el anciano, quien a la mañana siguiente avisó a la gente lo que le ocurrió. Todos ignoraron al anciano, pues creían que lo había soñado; sin embargo, el joven Alberto se hizo el disimulado al oír la historia del anciano, una señora se dio cuenta de la actitud de Alberto, y esto le causo demasiada curiosidad, por lo que comenzó a espiarlo para ver a que se dedicaba el joven.
La señora notaba que Alberto siempre salía de su casa a media noche, y regresaba con la ropa desgarrada, casi al amanecer. Esto lo comunico al pueblo quien ya estaba arto de que cada día amanecieran menos animales en el pueblo. La gente creyó en la señora y en lo que dijo el anciano, así que todos se mantenían alerta por las madrugadas para proteger a sus animales y atrapar a la bestia. Transcurrió una semana con todos alerta hasta que un viernes por la noche el anciano intento salvar a una vaca de ser devorada por la bestia y le disparó con su rifle directo al corazón. La bestia logro huir y no se volvió a aparecer en el pueblo.
Todos estaban más tranquilos porque ya ninguna bestia asesinaba a los animales. Pero la señora descubrió que la bestia que devoraba a los animales era el joven Alberto porque lo encontró en su casa muerto, asesinado por una bala en el corazón. La bala que le fue arrojada a la bestia el día que el anciano intento salvar a una vaca.
Nadie podía creer que aquella bestia era el joven Alberto, pero después encontraron en su casa un libro que contenía hechizos y conjuros para hacer pactos satánicos. Y encontraron que Alberto tenía un pacto con el diablo que solo se podría romper con la muerte de Alberto. Pero nunca encontraron la causa por la cual Alberto decidió vender su alma al diablo.
Ese libro fue quemado y sus cenizas fueron arrojadas a un río para que nadie pudiera convertirse en aquella bestia o quizás, en algo peor…
JAVIER UBALDO GONZALEZ FLORES 2º III T/M
No hay comentarios:
Publicar un comentario